viernes, 16 de enero de 2015

Hay mucho que decir, que aunque sobre un cuarto de la mitad, te las quiero decir día a día (sin faltar alguno).

  Seré breve esta vez, creo que no necesito usar páginas y páginas para ésto, ya que lo que realmente siento se lleva por dentro y no por un blog.
  Quiero que sepas, que aunque sea lo más tontogilipollasubnormalblablabla, éste que está aquí te quiere y te aprecia más que a nadie, sólo mira lo que tardo en encontrarte, y cuando no te encuentro porque no estás me pongo tontogilipollasubnormalblablabla. Y está feo que me ponga así. Pero tú bien sabes que llevo un chiquillo muymuy pequeñito dentro de mí, que lo único que quiere saber en el cabo del día es cómo conseguir en un único sólo momento hacerte sentir como la que lo tiene todo, la que nada le falta. Porque te quiero, sí, a ti, a aquella persona que me ha hecho cambiar en menos de un cuarto de la mitad de lo que llevo de vida, la que hace levantarme todos los días con la esperanza de que, en algún momento del día, por muy nublado que esté, salgo el Sol. 

Sí, ese Sol eres tú.